Las características diagnósticas centrales de este tipo de demencia son: Comienzo insidioso y progresión gradual. Declive temprano en la conducta interpersonal social y de la regulación de la conducta personal. Pérdida precoz de la introspección. Otras de las características presentes en esta demencia y que apoyan al diagnóstico son: Trastornos del comportamiento: deterioro en la buena presencia e higiene personal, rigidez e inflexibilidad mental con incapacidad para aceptar puntos de vista diferentes a los suyos, cambios en la dieta, aumento en la ingesta, distracción frecuente Trastornos en el lenguaje: falta de espontaneidad en el lenguaje, con uso frecuente de lenguaje estereotipado, o con muchas repeticiones, incluso en ocasiones presenta mutismo absoluto. Rasgos físicos: suelen presentar en la exploración física reflejos primitivos, de liberación frontal, como hociqueo, olfateo, succión. También puede existir acinesia, rigidez, temblor, incontinencia urinaria temprana etc.