Zaragoza llora la muerte del intérprete

El cuerpo del intérprete fallecido en ese atentado viaja hacia Zaragoza. En esa provincia se instaló hace 30 años cuando salió de Irán perseguido por cuestiones religiosas. En junio se vió obligado a cerrar su tienda de alfombras por culpa de la crisis. Pos eso decidió trabajar en Afganistán. Y hoy las banderas de Cuarte de Huerva, el pueblo zaragozano donde vivía, ondean a media asta. Tenía 55 años, estaba casado con una española y era padre de dos hijos, una chica de 17 años y un chico de 20. Era un vecino muy querido. A su domicilio no paran de llegar amigos rotos por el dolor.La de Afganistán era su primera misión como traductor.