Enérgica condena ante la violencia. Las autoridades alemanas han reprobado con firmeza los disturbios que se han producido durante el transcurso de la cumbre del G20 que ha tenido lugar en Hamburgo. De la misma forma, han advertido de que “no se puede dejar en manos de unos pocos delincuentes violentos” la decisión sobre lo que se puede o no celebrar en Alemania.

“Las imágenes que he visto son impactantes y me han dejado estupefacto. No tengo palabras”, declara Frank-Walter Steinmeier. “Suponen una razón más para estar aquí y dar las gracias a aquellos que se han enfrentado a la violencia”, añade el presidente de Alemania.

Steinmeier ha sido el primer político de alto rango en hacer acto de presencia en la zona del Schanzenviertel, epicentro de los disturbios en los que han resultado heridos en torno a 200 agentes de policía y se han registrado muchos daños en la propiedad privada. Alrededor de 150 manifestantes antisistema han sido detenidos por participar en los disturbios.

La violencia acorrala a los líderes del G20 https://t.co/ZXcqiPAKsV— EL PAÍS (@el_pais) 9 de julio de 2017