En los últimos tres días y según datos oficiales, más de 130.000 kurdos procedentes de Siria han entrado en territorio turco.

La ofensiva de los yihadistas del autoproclamado Estado Islámico está creando una crisis humanitaria importante para esta comunidad castigada.

Las autoridades han creado hospitales de campaña para atender a los refugiados

“No tenemos suficientes medicinas. Nos falta equipamiento de primera necesidad. Estamos intentando ayudar a nuestra gente bajo condiciones muy limitadas. Los heridos sirios de la frontera están llegando”., decía un voluntario.

En uno de los hospitales situado en la frontera con Siria, 250 refugiados son atendidos diariamente, muchos de ellos personas mayores y niños.

“Hemos pedido ayuda a farmacias y a almacenes de medicinas. No solo medicamentos. También mantas y almohadas porque la gente duerme a la intemperie, los niños, los bebés. Necesitan estar resguardados. Como pueden ver estamos luchando por el bien de la humanidad”, añadía otro.

Ante la situación desesperada de los kurdos, el Gobierno turco decidió abrir el viernes ocho pasos en la alambrada que separan los dos países.