Enfoque - Perú, la corrupción como ADN de la política
- hace 10 años
En Perú, la corrupción se ha convertido en un mal endémico. Según un informe de la Procuraduría Anticorrupción de ese país, de los 1841 alcaldes que cumplen funciones a nivel nacional, 1699 (92 %) están siendo investigados por peculado de uso, malversación de fondos, negociación incompatible y colusión.
La escandalosa cifra de quienes están bajo sospecha, muestra también nexos del poder local con organizaciones criminales, grupos narcos y bandas, una cruda realidad que recuerda tiempos ya vividos en el país.
En una clara muestra de desfachatez política, 19 de los 25 presidentes regionales tienen pendientes asuntos judiciales, 8 de ellos ya están siendo procesados por presuntos actos de corrupción y de estos, 4 presentaron sus listas para competir por la reelección.
El presidente peruano, Ollanta Humala, ha anunciado que su Gobierno reforzará el sistema anticorrupción en todos sus niveles y entidades. Sin embargo, sus palabras no convencen a muchos porque, hasta ahora, la voluntad política contra la corrupción no ha pasado de la más pura retórica.
Para Luis Esteban G. Manrique, redactor jefe de la revista Política Exterior la justicia peruana va muy lenta y además ha habido jueces que le han hecho poco favor a su profesión. "Hay que presionar, la ciudadanía debe darse cuenta de los derechos que tiene y exigir que no se les robe más. Hay que cambiar la idea de que no importa que robe un político mientras haga obras. En el Perú hay una democracia inmadura, hay corrupción en buena parte de nuestras instituciones".
Por su parte, el abogado Demóstenes Mamani considera que por muchos años la corrupción ha sido uno de los flagelos del país, pero "gracias a los medios de comunicación independientes, se ha logrado sacar a la luz muchos de estos casos, presentes en todos los poderes".
Invitados:
* Demóstenes Mamani, abogado peruano y activista pro Derechos Humanos
* Luis Esteban Manrique, redactor jefe de la revista "Política Exterior"
La escandalosa cifra de quienes están bajo sospecha, muestra también nexos del poder local con organizaciones criminales, grupos narcos y bandas, una cruda realidad que recuerda tiempos ya vividos en el país.
En una clara muestra de desfachatez política, 19 de los 25 presidentes regionales tienen pendientes asuntos judiciales, 8 de ellos ya están siendo procesados por presuntos actos de corrupción y de estos, 4 presentaron sus listas para competir por la reelección.
El presidente peruano, Ollanta Humala, ha anunciado que su Gobierno reforzará el sistema anticorrupción en todos sus niveles y entidades. Sin embargo, sus palabras no convencen a muchos porque, hasta ahora, la voluntad política contra la corrupción no ha pasado de la más pura retórica.
Para Luis Esteban G. Manrique, redactor jefe de la revista Política Exterior la justicia peruana va muy lenta y además ha habido jueces que le han hecho poco favor a su profesión. "Hay que presionar, la ciudadanía debe darse cuenta de los derechos que tiene y exigir que no se les robe más. Hay que cambiar la idea de que no importa que robe un político mientras haga obras. En el Perú hay una democracia inmadura, hay corrupción en buena parte de nuestras instituciones".
Por su parte, el abogado Demóstenes Mamani considera que por muchos años la corrupción ha sido uno de los flagelos del país, pero "gracias a los medios de comunicación independientes, se ha logrado sacar a la luz muchos de estos casos, presentes en todos los poderes".
Invitados:
* Demóstenes Mamani, abogado peruano y activista pro Derechos Humanos
* Luis Esteban Manrique, redactor jefe de la revista "Política Exterior"