Todos formaban parte de la cadena de mando de la insurgencia afgana antes de su detención. Ya están en Catar, donde deberán pasar un año bajo estrecha vigilancia. El canje, según el Partido Republicano, podría comprometer la seguridad nacional.

Para Chuck Haguel, en cambio, Estados Unidos ha sido fiel a su política de no negociar con terroristas. “ El sargento Bergdahl es un prisionero de guerra y este es un proceso normal para traer de vuelta a casa a tus prisioneros”

El sargento Bowe Bergdahl fue entregado a las fuerzas especiales estadounidenses el sábado por la noche en una zona del este afgano. Había sido capturado en 2009 en la provincia de Paktika.

Sus padres aún no han hablado con él:

“ No le hemos llamado por teléfono y hay una explicación para ello. Bowe ha estado tanto tiempo lejos que el regreso va a ser muy difícil. Es como un buceador que se zambulle a mucha profundidad y antes de salir del agua debe pasar por la cámara de descompresión”

El soldado ya se encuentra en un centro médico militar en Alemania, donde comenzará el proceso de readaptación, antes de volar a Estados Unidos. Su padre se ha dejado crecer la barba al estilo salafista y ha aprendido pastún para facilitarle las cosas.