Las fuertes precipitaciones que sacuden Inglaterra desde hace semanas han provocado la mayor crecida del río Támesis desde que se tienen registros, en los años 80 del siglo pasado. Esta situación se suma a las desvastadoras inundaciones en el condado de Somerset, en el suroeste de Inglaterra, la zona más castigada por la cadena de temporales. Las previsiones hablan de nuevas precipitaciones y fuertes vientos.

En Portugal, ocho distritos se encuentran en alerta naranja. Se esperan ráfagas de viento que pueden alcanzar los 130 kilómetros por hora. El mal tiempo ha provocado miles de incidentes en el país. En algunos de ellos se han registrado heridos de carácter leve.

En España, una nueva borrasca ha puesto en alerta a casi toda la península por viento, oleaje y nieve.

En el litoral atlántico francés, miles de aves marinas han sido halladas sin vida. Al parecer, han muerto de agotamiento tras la sucesión de tormentas.