Nuevo ataque contra una manifestación opositora en Bangkok
- hace 10 años
Al menos 28 heridos por la explosión de dos granadas al paso de una manifestación antigubernamental este domingo en Tailandia. Uno de ellos es una periodista local. Varios hombres en moto llegaron a la plaza de la Victoria y lanzaron los dos artefactos.
El viernes un opositor murió y 35 resultaron heridos en un ataque de las mismas características.
“La primera explosión que he oído ha sido más débil la gente miraba para todos lados. He visto a los guardias de seguridad correr tras un sospechoso. Un minuto después oí la segunda explosión”, ha dicho un testigo.
Las víctimas han sido trasladadas a diversos hospitales de la capital. Desde noviembre las protestas contra el Ejecutivo han dejado nueve muertos y cerca de 500 heridos.
“Tras la explosión”, explica otra herida, “corrí, y una segunda bomba cayó de un tejado, seguí corriendo y de repente sentí dolor en la cabeza. Tenía un pequeño trozo de metralla de la bomba en la cabeza y el médico lo ha extraído.”
Desde el lunes la oposición ocupa varias de las principales arterias de Bangkonk en un intento de derribar al Gobierno de Yingluck Shinawatra y de provocar un masivo boicot de las elecciones del 2 de febrero.
El viernes un opositor murió y 35 resultaron heridos en un ataque de las mismas características.
“La primera explosión que he oído ha sido más débil la gente miraba para todos lados. He visto a los guardias de seguridad correr tras un sospechoso. Un minuto después oí la segunda explosión”, ha dicho un testigo.
Las víctimas han sido trasladadas a diversos hospitales de la capital. Desde noviembre las protestas contra el Ejecutivo han dejado nueve muertos y cerca de 500 heridos.
“Tras la explosión”, explica otra herida, “corrí, y una segunda bomba cayó de un tejado, seguí corriendo y de repente sentí dolor en la cabeza. Tenía un pequeño trozo de metralla de la bomba en la cabeza y el médico lo ha extraído.”
Desde el lunes la oposición ocupa varias de las principales arterias de Bangkonk en un intento de derribar al Gobierno de Yingluck Shinawatra y de provocar un masivo boicot de las elecciones del 2 de febrero.